🌹Entre Rosas y Espinas🌹
Por el Trotamundos
Buenos días y feliz lunes a todos mis admiradores y detractores, mucho tiempo he tenido que estar en penumbras, relamiendo mi silencio un tanto obligado por mis vicios y tertulias personales, decisiones al fin y al cabo; aun contra mis principios que aunque usted no lo crea como todo ser humano poseo.
Ayer en mi auto y motivada oscuridad, alejado de la opinión, conviviendo con parte de mi familia (viendo 5 películas en Netflix, HBO u algo así), abandone mi rutina de ir al centro de Zihuatanejo, tomarme unas “frías” llegar a casa y dormirme; soy un alcohólico, nunca lo he negado.
En una de esas joyas de la cinematografía (respetando los derechos de autor), un hombre se alza como Dios, quita la vida de manera rápida y sin dolor a seres que están condenados al sufrimiento largo, inexorable sin remedio (proceso terminal); del otro lado esos que con la ley en la mano y obviamente contra la Eutanasia, le acorralan y logran terminar con esta práctica.
Lo anterior espero interpretar y aplicar a la vida real donde coexisten viles mortales que se postulan como un Dios o peor, como aquellos que lo crucifican, creyéndose poseedores de la verdad absoluta.
Diariamente vemos como en un afán de cubrirse las espaldas, seudo líderes, crucifican a quien ellos culpan de sus errores, olvidando que los verdaderos líderes corrigen en privado y alaban en público, enseñan, suman para cualquier batalla por venir.
Por alguna razón, esto sigue pasando (obvio, sabemos porque), el poder enajena a quienes no están preparados, les falta un toque de humanidad o simple y sencillamente no quieren aprender de los errores que como todo ser humano tenemos y no dejaremos de cometer.
Pudiera adentrarme mucho más entre las grietas de estas vicisitudes, pero con esto basta para ver que la oscuridad donde he tenido por permanecer era no tanto abrazada, sino por respeto a mi agradecimiento, sin embargo, algunos parece le llevaron más allá y confundieron mi posicionamiento.
Soy Jorge de la Rosa Bernal, Técnico Programador Analista desde 1988, profesor de computación a los 20 años, fotógrafo, video camarógrafo, bibliotecario, reportero y escritor, entre otras; será la historia escrita con verdad no por los vencedores quien me juzgue, no quien cree pisarme.
Regreso de mi autoexilio a contribuir para un mejor lugar, donde aún creo hay justicia, donde las máscaras no sea lo que veamos, sino el corazón de quien esté detrás.
PD cualquier parecido con la realidad es mera y “puritita” coincidencia, nada de lo que aquí se escribe puede ser cierto, el Trotamundos como el alcohol y las drogas es responsabilidad de quien lo toma, por tanto a mí ni me culpen de sus desacertadas apreciaciones y decisiones je hasta la próxima. (Solo escribo una cuartilla para no aburrirlos más).